IT Hunter

lunes, 8 de septiembre de 2014

Conoce los nuevos desafíos de las jefaturas.

Como en todo ámbito, los retos y desafíos han ido cambiando para los superiores y jefaturas de todo tipo de organización. Actualmente deben convivir con otro tipo de profesionales para lograr un liderazgo importante que los mantenga en el cargo.
Así lo destaca Benjamín Toselli, presidente ejecutivo de IT Hunter, una consultora en la búsqueda y selección de talentos para cargos claves, quien sostiene que hoy son varios los factores con los cuales una jefatura debe controlar para lograr una buena gestión.
'Hoy estamos en un mundo cambiante y complejo que se transforma permanentemente. Esto genera una serie de retos para quienes se encuentran en puestos de poder en una compañía. La velocidad para adaptarse a los cambios, por ejemplo, resulta crucial para sobrevivir y seguir vigentes. Esto último es válido tanto para las personas como las organizaciones', sostiene el directivo.
Según el especialista para ello se deben tener algunos puntos en cuenta como por ejemplo, la globalización, donde los altos niveles de competitividad, el desarrollo de las tecnologías y la integración de las economías ha transformado el mundo en una verdadera aldea global, en donde cada mercado puede influir o ser influenciado por el resto.
Según dice Toselli, los jefes modernos deben comprender que el idioma de los negocios es el inglés; por lo tanto dominar esa lengua es clave para proyectarse como profesional y para proyectar la empresa en el extranjero. 'Además, está comprobado que un trabajador puede percibir hasta 30% más de sueldo si es bilingüe', dice.
También hay que poner énfasis en los resultados y no tanto en las horas que pasa cada trabajador en la oficina.

Fuentes:
Estrella Arica
Estrella Iquique
Estrella Antofagasta
Estrella Tocopilla
Estrella Loa
Estrella Valpo
Estrella Chiloé

Las claves para que los "jefes" mantengan estabilidad laboral pese a vaivenes económicos.

Expertos plantean que los altos mandos de las empresas "deben ser capaces de observar la situación de manera estratégica y tomar decisiones de manera clara, informada y prudente".

 Una baja en el crecimiento de la economía tiende a impactar de manera directa a las organizaciones, las cuales evidencian los efectos de la desaceleración en su conformación y funcionamiento.
El consultor de ventas, marketing y logística de Randstad, Cristián Pérez, señala que "en la mayoría de los casos, se observa una disminución en las ventas, por lo tanto, las ganancias de las empresas se ven afectadas, ya que se desincentiva el consumo y la gente se comienza a preparar para una especie de recesión o crisis, que en ocasiones nunca llega".

Asimismo, el experto indica que esta situación incide en una baja en la inversión, "debido a que las empresas y consumidores toman decisiones de manera mucho más cautelosa; y los indicadores como competitividad y empleo se comienzan a ver resentidos por efecto dominó".

Frente a este escenario, los altos mandos "deben ser capaces de observar la situación de manera estratégica y tomar decisiones de manera clara, informada y prudente, buscando el feedback y acuerdo por parte de los principales actores de la organización. Esto le permitirá a la empresa conducirse con mayor seguridad ante los vaivenes propios de la economía imperante en este momento”, advierte María Luisa Arias, ingeniero consultor de Hays.

Por su parte, la directora de la Escuela de Ingeniería de Ejecución en Administración de Negocios de la Universidad Central, Catalina Maluk, sostiene que "independiente del presupuesto anual aprobado para las distintas áreas dentro de la organización, frente a un escenario de desaceleración económica que traiga consigo una disminución de los ingresos, las jefaturas tienen el desafío de disminuir el gasto y llevar un control y ejecución presupuestaria, priorizando aquellas actividades estratégicas para el funcionamiento normal de la organización y disminuyendo gastos que no son esenciales y no afecten el desarrollo de su negocio".

"También es necesario alinear al equipo con las medidas adoptadas por la jefatura y evitar desvinculaciones: el desafío es disminuir el gasto tratando de afectar en la menor medida al equipo de trabajo", agrega.

La importancia de las habilidades blandas

Los expertos coinciden en que los altos ejecutivos tienen que poseer habilidades blandas no sólo en períodos de contracción económica, sino que éstas deben ser parte de su perfil del cargo para alcanzar las metas planteadas con sus trabajadores y lograr los objetivos estratégicos de la organización.

El director ejecutivo de IT Hunter, Benjamín Toselli, explica que "las jefaturas deben ejercer un liderazgo efectivo y mantener la moral en alto de sus colaboradores, inyectándoles confianza en relación al futuro de la compañía y las fuentes laborales, para que ellos puedan desempeñar sus tareas de manera tranquila y sin perder el foco".

El gerente general de Mandomedio, Ignacio González, agrega que "debe desarrollar una buena comunicación con sus trabajadores, ser abierto y transparente respecto de lo que está sucediendo y cómo se enfrentará; puesto que la situación será más llevadera con un equipo unido".

Cristián Pérez concluye que "los efectos económicos no pueden esquivarse en un 100%, pero sí se pueden amortiguar. En estas situaciones, lo importante es hacer una lectura del mercado y decidir cuál es el mejor camino para poder acercarse a los objetivos. Esto significa que hay que llevar la empresa a contextos totalmente diferentes de lo acostumbrado, hacer una proyección y actuar de acuerdo a eso".

Fuente: Emol